Pero antes de prestarle alegremente tu bonito Mac a un amiguete deberías estar seguro de que las claves o passwords que vas guardando en el sistema no pueden ser expuestas fácilmente.
Experimento:
Abre la terminal y teclea esto:
security dump-keychain -d ~/Library/Keychains/login.keychain
¿Empiezan a aparecer todas tus passwords?
Si empiezan a brotar como locas pulsa Control+C para detener la terminal.
Pues eso, que le dejas la máquina a cualquiera y puede extraer sin problemas todas tus claves.
La solución es simple (afortunadamente):
Abre el Keychan Access mediante Spotlight, Alfred o Quicksilver
Haz click en el botón del candado para bloquear las passwords.
Así te pedirá siempre la password del ordenador para ver/usar las claves almacenadas.
También puedes:
1) Hacer click con el botón derecho sobre el botón de "login keychain"
2) Elegir "Change settings for Keychain login"
3) Marcar "Lock after"
4) Determinar los minutos de actividad según tus preferencias.
De esta forma se bloqueará el depósito de claves a los x minutos tras los cuales volverá a pedirte la clave de acceso.
De esta forma ya no es posible ver tus contraseñas... a no ser que dejes alegremente que la gente conozca tu clave de acceso al ordenador.
Mucha gente no le da importancia a esto.
Pero ya ves que puede ser un peligro.
Disfruta tu Mac.
Créditos: Songzme
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